Speeder de Darmstadt: ¡Casi cuatro años de prisión tras una persecución arriesgada!
Un joven de 25 años fue condenado a más de tres años de prisión tras un viaje a exceso de velocidad en Darmstadt; el proceso aún no es legalmente vinculante.

Speeder de Darmstadt: ¡Casi cuatro años de prisión tras una persecución arriesgada!
Un grave incidente conmociona a Darmstadt y genera preocupaciones sobre la seguridad vial. El tribunal regional de Darmstadt ha condenado a tres años y diez meses de prisión a un joven de 25 años de Arheilgen. El motivo de la sentencia es su participación en una carrera de vehículos prohibida, que no sólo provocó un grave accidente sino que también supuso un grave riesgo para la salud. El incidente ocurrió el 2 de septiembre de 2024, cuando el acusado circulaba por las calles a velocidades de hasta 100 km/h, ignorando persistentemente los semáforos en rojo y circulando por las aceras, las vías del tranvía y en el carril contrario. Se trató de una auténtica maniobra por exceso de velocidad que acabó en desastre al chocar sin frenar con un Skoda blanco, cuyo conductor, de 30 años, resultó gravemente herido.
Particularmente aterradoras son las declaraciones del acusado camino al hospital, cuando dijo: "El Todopoderoso me ordenó que lo hiciera". Estas palabras dieron lugar a una intensa investigación por parte de la policía criminal del estado de Hesse, ya que inicialmente se sospechaba de una ola de asesinatos por motivos islamistas. Afortunadamente, esta sospecha fue refutada; Los cargos de intento de asesinato fueron retirados por el fiscal durante el juicio. Según [FR].
Los problemas psicológicos como factor.
Esta condición psicológica del acusado no fue casualidad. Antes del fatídico viaje, tras una discusión con sus superiores, intentó deshacerse de su descontento intentando dimitir, lo que, según [hessenschau.de/panorama/nach-Schwemem-unfall-darmstaedter-raser-muss-knapp-vier-jahre-in-haft-v1,darmstadt-verfahren-raser-Judg-100.html), quedó documentado en vídeo. Un experto psiquiatra finalmente diagnosticó “psicosis farmacológica con síntomas maníacos”, lo que subraya aún más la gravedad de la situación. El juez informó durante el juicio que el acusado se encontraba en una fase maníaca, es decir, que no había intención aparente de matar.
En total, la fiscalía propuso una pena de prisión de cuatro años y diez meses, mientras que la defensa pidió una pena suspendida de dos años. Al final, el tribunal decidió que el hombre no podría recuperar su licencia de conducir hasta dentro de cinco años. Queda por ver si la sentencia se mantendrá, ya que aún no es jurídicamente vinculante.
El caso arroja mala luz sobre la seguridad vial en la región y muestra lo importante que es que un comportamiento tan peligroso sea castigado y combatido preventivamente de manera efectiva. Porque, en serio, ¿cuántas situaciones más que ponen en peligro la vida tienen que ocurrir antes de que se tomen medidas suficientes?